Hace un par de días hice una compra que tenía pendiente. Me disponía a pagar, pero como los 20 euros que llevaba encima no eran suficientes, decidí pagar con tarjeta. La saqué de la cartera, iba a hacer lo mismo con el DNI para hacer la comprobación pertinente, pero..... ¡no estaba donde siempre! Igual lo había puesto en algún otro lugar. Miré en los bolsillos de la chaqueta, en los del pantalón, en el bolso...¡Ni rastro!
La dependienta, algo incómoda, me dió la opción de enseñarle algun otro tipo de documento identificativo. Acto seguido procedió a pasar la tarjeta por la máquina y, para sorpresa de las dos, parecía no funcionar. Lo intentó dos o tres veces con el mismo resultado. La situación resultaba un tanto embarazosa.
Si fuera supersticiosa pensaría que el hecho de que fuera martes 13 igual tuvo algo que ver. Como no lo soy, opté por aceptar la pérdida y hacer lo pertinente en estos casos.
La dependienta, algo incómoda, me dió la opción de enseñarle algun otro tipo de documento identificativo. Acto seguido procedió a pasar la tarjeta por la máquina y, para sorpresa de las dos, parecía no funcionar. Lo intentó dos o tres veces con el mismo resultado. La situación resultaba un tanto embarazosa.
Si fuera supersticiosa pensaría que el hecho de que fuera martes 13 igual tuvo algo que ver. Como no lo soy, opté por aceptar la pérdida y hacer lo pertinente en estos casos.
2 comments:
Però al final vas poder pagar...?
Finalment vaig poder pagar recorrent al pla C. En aquest cas va ser pagar amb una altra targeta, d'aquelles que el banc t'endossa amb l'argument de que sempre va bé tenir una segona targeta per si de cas... Habitualment ni tan sols la tinc present!
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