20/05/2008

Cuando empezó a ir bien

La semana pasada tuve la oportunidad de ir -muy bien acompañada- a un concierto de un conocido cantautor. No puedo decir que sea una admiradora incondiconal, pero me resulta agradable escucharle, tanto cuando canta como cuando habla. Sus canciones suelen tener mensaje y me da la sensación de que es una persona sensata, de espíritu crítico, con gran sensibilidad y buen sentido del humor.

El concierto tuvo lugar en un gran auditorio, pero uno podía llegar a sentirse como si estuviera entre amigos. El público reconocía con facilidad los primeros acordes de cada canción y tarareaba orgulloso cada uno de los temas, incluso los más nuevos. De vez en cuando los focos iluminaban y daban protagonismo a lo que realmente parecía una alfombra de gente, eran instantes muy emotivos.

Entre canciones, el artista regalaba algún comentario o contaba alguna anécdota. Hubo un momento en que dijo algo así como "cuando las cosas empezaron a ir bien hace 14 años...". Y entonces yo empecé a pensar como debía ser su vida antes de que "las cosas empezaran a ir bien". Seguramente el camino no había sido nada fácil, igual nunca llegó a imaginar tal éxito... Yo misma me preguntaba si es posible describir con palabras la emoción de escuchar centenares o incluso miles de personas cantando con entusiamo lo que uno un día compuso con poca más compañía que una guitarra.


2 comments:

Segona said...

No sé si amb quaranta-dos anys podem parlar de "muchacho"! Això sí, té un aspecte juvenil.

Jo també hi vaig anar ben acompanyada...

Cris said...

Això de l'edat i la joventut diria que és una mica relatiu, però tens raó. M'has convençut i he decidit canviar de paraula, encara que igual n'escolliré una de més neutra.

Gràcies per la companyia, per la proposta i per les gestions!