Suena el teléfono.
- Cris, ¿cómo estás? Me has llamado, ¿no?
- Pues....no. Ahora quedaré mal, pero no te he llamado...
- Tenía una llamada perdida. Debo haberme confundido.
- Tranquila, no hay problema. Ya que estamos... ¿cómo estás?
- .....
Pasa justo una hora. Vuelve a sonar el móvil.
Es alguien diferente.
- Perdona Cris, no me ha dado tiempo de coger el teléfono.
- ¿Cómo?
- Pues que estaba justo entrando por la puerta y no he llegado.
- Hmmm... perdóname tú ahora. ¿Entonces yo te he llamado?
- Sí, ¿no? Tengo una llamada tuya...
- Pues debe ser que no he bloqueado el móvil y habré apretado algo sin querer... Ahora miraré. Oye, ¿cómo estás?
- ....
Colgamos. Intrigada miro el teléfono y... está bloqueado. Por curiosidad miro las llamadas realizadas y la última llamada que hice es de ayer a última hora. ¡Qué cosa tan curiosa y extraña al mismo tiempo! No entiendo nada de nada, pero no doy más vueltas.
NOTA: poco después las dos personas me aclaran que se confundieron. Fue un placer hablar con ellas (y más cuando no lo esperaba), pero también está bien que haya quedado resuelto el misterio. Bueno... ¡por lo menos algo más resuelto!
- Cris, ¿cómo estás? Me has llamado, ¿no?
- Pues....no. Ahora quedaré mal, pero no te he llamado...
- Tenía una llamada perdida. Debo haberme confundido.
- Tranquila, no hay problema. Ya que estamos... ¿cómo estás?
- .....
Pasa justo una hora. Vuelve a sonar el móvil.
Es alguien diferente.
- Perdona Cris, no me ha dado tiempo de coger el teléfono.
- ¿Cómo?
- Pues que estaba justo entrando por la puerta y no he llegado.
- Hmmm... perdóname tú ahora. ¿Entonces yo te he llamado?
- Sí, ¿no? Tengo una llamada tuya...
- Pues debe ser que no he bloqueado el móvil y habré apretado algo sin querer... Ahora miraré. Oye, ¿cómo estás?
- ....
Colgamos. Intrigada miro el teléfono y... está bloqueado. Por curiosidad miro las llamadas realizadas y la última llamada que hice es de ayer a última hora. ¡Qué cosa tan curiosa y extraña al mismo tiempo! No entiendo nada de nada, pero no doy más vueltas.
NOTA: poco después las dos personas me aclaran que se confundieron. Fue un placer hablar con ellas (y más cuando no lo esperaba), pero también está bien que haya quedado resuelto el misterio. Bueno... ¡por lo menos algo más resuelto!
2 comments:
Bonita historia...o realidad tal vez!
Sin embargo me entristece ya que la interpretación que yo le veo es la falta de comunicación y el uso de la mentira (consciente o inconscientemente) con el fin de poder comunicar. Imagino que es muy humano el sentirse sólo en ciertos periodos (más o menos largos según la persona) de la vida. Me da la impresión de que sucede más a menudo en las grandes urbes y en paises desarrollados: mientras más gente tienes a tu alrededor, más desconocidos viviendo tan cerca, más sólo te sientes. En la práctica parece muy sencillo coger el telefono y llamar a cualquier amigo para simplemente decirle: "me apetecía hablar contigo" o "estaba aquí solo aburrido y pensé en llamarte". Pero lo hacemos? Sabemos pedir ayuda? O visto desde el otro punto de vista: sabemos/tenemos paciencia para ayudar cuando un conocido nos necesita?
Alba
PS: Cris felicidades por el blog! Por cierto dejo mi pueblito en England para volver a BCN y luego rumbo al sur :)
En este caso yo creo que fue una confusión/casualidad, pero me gusta tu reflexión. Creo que es muy acertada. Agradezco que la compartas y que yo pueda compartir el blog contigo.
Ya me contarás tus planes. De momento te deseo un feliz cambio de etapa!
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